lunes, 9 de marzo de 2009

Planta de san Pedro del Vaticano (Miguel Ángel)

En  1452 Alberti recibió el encargo del papa Nicolás V de construir el nuevo templo de san Pedro del Vaticano. En 1505, el papa Julio II decide hacer una nueva basílica totalmente nueva. Tras un concurso, acepta el nuevo plan de Bramante: concibe una basílica con planta de cruz griega con cúpula. Rafael de Sanzio, Antonio de Sangallo, Baltasare Peruzzi, van asumiendo la continuación de la obra. La planta cambiará de cruz griega a cruz latina y viceversa. Por fin, en 1546 la suerte del edificio queda en manos de Miguel Ángel que en ese momento tiene ya 72 años.
Miguel Ángel vuelve a la idea primitiva de plan central en forma de cruz griega con una cúpula en en centro. Pero modifica el esquema de Bramante
Reduce las esquinas del cuadrado para que las áreas más pequeñas puedan recibir luz directa. Magnifica la cúpula y la dota de un perfil más elevado. Suprimer las torres de las cuatro esquinas, con lo que la cúpula toma una mayor prestancia. No hay que olvidar el sentido platónico de la cúpula como imagen platónica de la perfección de Dios. 
De las cuatro puertas de Bramante se pasa a una sola puerta. La situación de la iglesia católica ha cambiado; la ruptura cristiana a partir de Lutero hace que se modifique el sentido de la puerta. Si en Bramante se quería representar con cuatro puertas el carácter universal de la iglesia, ahora ya no es posible mantener esta idea. Para Miguel Ángel la iglesia es ahora la madre que acoge a sus fieles, y por eso coloca una sola puerta de acceso. 
Miguel Ángel da a la obra un estilo personal y dota a todo el conjunto de gran unidad. Es una obra maestra de la arquitectura renacentista. No verá realizada la culminación de la cúpula, que terminará Della Porta, pero su idea se mantendrá.

1 comentario:

Brenda dijo...

Muchas gracias por el artículo, me sirve para los alumnos a los que muestro Historia del Arte.Es importante la simbología de las estructuras.